Estuvo cautiva casi un año y se encuentra gestando el octavo mes. Llegó llorando a la Comisaría 25 de barrio Aeroparque de la ciudad de Orán a pedir ayuda. 

El pasado  jueves, una mujer se presentó llorando, con miedo, solicitando ayuda a los efectivos policiales de la Comisaría N° 25 en Orán, diciéndo que estuvo encerrada en una pieza por su pareja y gracias a la ayuda de su suegra, logró escapar.

La víctima hace un año, comenzó una relación sentimental y concubinato con Escobar Héctor de 27 años, luego de un mes, el muchacho se empezó a tornar celoso, agresivo, hasta llegar a golpearla todos los días, luego la encerró en una pieza cuando quedó embarazada y la mantuvo cautiva, no dejándola salir ni al baño.

Personal de la salud, asistieron a la joven mujer, quien realizó la denuncia policial para dar intervención a la Fiscalía y ordenaron proceder con la inmediata detención del agresor.

Según pudo saber HolaSalta.com, la mujer estuvo «encerrada casi 8 meses en una habitación precaria» y humilde de la casa de su suegra, con pocos alimentos y en proceso de gestación, donde el acusado le ponía llaves a la puerta y en una oportunidad, en el mes de junio, pudo escapar y pedir ayuda a su familia, pero fue en vano. Escobar amenazó a los familiares con un cuchillo, la sacó a la fuerzas, la subió a un remis y al llegar nuevamente a la habitación, la empezó a golpear brutalmente hasta quedar toda ensangrentada, con heridas que hasta hoy no fueron curadas.

La joven contó que durante este tiempo aguantó todo tipo de violencia, psicológica, verbales y físicas, que sin motivos, Escobar abusaba y la amenazaba frecuentemente que la iba a matar.

El jueves por la mañana, el agresor se retiró del domicilio y la suegra, quien aparentemente también sufre de violencia, la ayudó a escapar de la habitación, ella solo corrió, sin ver a nadie, quería llegar a la comisaría y pedir ayuda a los policías. 

Desde la Fiscalía interviniente, no brindaron información oficial respecto al caso, que hasta donde se sabe, sobre el peligroso agresor pesa una orden de detención y se encuentra prófugo. En la fuerza policial, hay bronca e impotencia «por los tiempos de la justicia, que nos son los mismos que las emergencias».